Tres chinas en París
MADRID, FUNDACIÓN JUAN MARCH
Manuel GARCÍA, LE CINESI
Marina Monzó, Cristina Toledo, Marifé Nogales, José Manuel Zapata. Piano y dirección musical: Rubén Fernández Aguirre. Dirección escénica: Bárbara Lluch. 11 de enero
Tres señoritas chinas se aburren encerradas en el salón de una mansión, sin saber en qué ocupar el tiempo, hasta que llega un muchacho (¡un hombre!) llamado Silango, que les canta las maravillas de Europa, o más exactamente de Francia y aún más concretamente de París. Allí, al parecer, las mujeres mandan. El caso es que nuestros cuatro amigos, en vez de iniciar lo que parece que era de esperar, que es una revolución cultural, se ponen a imaginar una función de teatro cantado. Después de algunas dudas, cada una de ellas acabará asumiendo la defensa de un género musical.
Lisinga, hermana de Silango como es fácil de entender, se hará cargo de la tragedia, con un aria en la que Andrómaca –Andrómaca a secas, sin sinisizar, por así decirlo- se enfrenta a los tremendos dilemas morales que la asaltan en el exilio. La soprano Marina Monzó se enfrentó con valentía a esta auténtica prueba de fuego, con un dominio absoluto de los saltos, los filados y toda clase de ornamentaciones vertiginosos. Una técnica impecable y una voz de salud envidiable le permitieron salir más que airosa del reto, más complicado aún al estar acompañada únicamente del piano. Otra de las señoritas orientales, a cargo de la también soprano Cristina Toledo, defendió el género pastoril, con unas encantadoras melodías, más sencillas pero sumamente adornadas, que requieren una fina sensibilidad para la expresión de ese supremo artificio que es lo natural. Muy bien. (…)
Seguir leyendo en Ópera Actual, 18-01-17